Revista N° 346

Cada 20 de noviembre se celebra en nuestro país el Día de la Soberanía Nacional, en conmemoración de la batalla de la Vuelta de Obligado sobre el río Paraná de 1845.

Esta batalla tuvo un significado muy relevante para nuestro país. Fue un acto de soberanía nacional, que ratificó y garantizó la independencia, la libertad y la unidad nacional de manera inquebrantable. Fue una conquista "para siempre". Con esta gesta, nuestros patriotas ganaron, para el territorio, su capacidad de autodeterminación, su identidad y su cohesión nacional.

Sin embargo, la soberanía no es un concepto estanco, no es un producto acabado. Es un proceso perpetuo, es un entramado que debe hilarse día a día, en el ejercicio responsable de la ciudadanía.

En el contexto actual, la soberanía se sostiene en una tarea cotidiana, que exige, de cada ciudadano su aporte a la construcción de una convivencia pacífica y responsable.

En ella cobra particular relevancia la educación, en todos sus niveles y modalidades, como el ámbito propicio para la formar al soberano y para la construcción de una sociedad justa, equitativa y empática.

Por: Lic. Claudia Cavallotti Coordinadora Editorial